- Casi la mitad de los préstamos e inversiones del Grupo BEI en la Unión Europea se destinaron el año pasado a regiones de cohesión, según un nuevo informe del Grupo.
- Esta financiación contribuye a crear empleo, mejorar la sanidad y la educación, aumentar la oferta de energías renovables y acelerar la conectividad digital, impulsando la cohesión social, la productividad y el bienestar.
- Más inversiones serán necesarias en el futuro para reforzar la igualdad de oportunidades y el crecimiento económico en toda la UE.
En 2023, el Grupo Banco Europeo de Inversiones (BEI) superó sus objetivos de financiación en materia de cohesión en toda la UE, apoyando proyectos para mitigar las disparidades regionales. El tercer informe anual sobre las actividades del Grupo BEI en las regiones de cohesión de la UE pone de relieve cómo la adopción de medidas específicas libera el potencial regional e incide directamente en las personas, mejorando su calidad de vida. También subraya que se necesitan más inversiones sociales y mayor conectividad para impulsar la convergencia regional en toda la UE.
El Grupo BEI, formado por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Fondo Europeo de Inversiones (FEI), destinó 36.200 millones de euros en 2023 a proyectos en las zonas más pobres de la UE, conocidas como regiones de cohesión. Esta cifra representa casi la mitad (47 %) de los préstamos e inversiones realizados por el Grupo BEI en la UE el año pasado. Solo los préstamos de cohesión formalizados por el BEI en 2023 ascendieron a 29.800 millones de euros, es decir, el 45,1 % del total de los compromisos de financiación en la UE, superando así el objetivo del 42 % establecido por el Banco.
Los préstamos de cohesión realizados por el BEI en 2023 alcanzaron su nivel más alto en los 65 años de historia del Banco, con un notable incremento en la financiación de pequeñas y medianas empresas (pymes) y empresas de mediana capitalización (mid-caps). El apoyo a la acción por el clima y a la sostenibilidad medioambiental representó el 60 % del total de compromisos en las regiones de cohesión. Los cinco países más beneficiados el año pasado fueron Francia, España, Polonia, Italia y Grecia.
“La cohesión social y territorial constituye un eje central de la misión del Grupo BEI y es una de nuestras principales prioridades estratégicas”, ha declarado la presidenta del Grupo BEI, Nadia Calviño. El talento está distribuido por igual en toda la UE, pero las oportunidades no. Ofrecemos oportunidades allí donde está el talento, respaldando así las políticas de la UE. Cada lugar, cada región, importa”.
Se espera que las operaciones firmadas por el BEI en 2023 permitan:
- acceder a mejores servicios sanitarios a más de 5 millones de personas
- suministrar electricidad generada a partir de fuentes de energía renovables a más de 6 millones de hogares,
- conectar a más de 6 millones de nuevos abonados a los servicios 5G,
- generar un volumen significativo de empleos directos e indirectos.
“El Grupo BEI está cumpliendo sus compromisos y destina importantes recursos a la cohesión. Además de la financiación, dos tercios de nuestros servicios de asesoramiento se centran en las regiones de cohesión, aportando un apoyo integrado y adaptado a las necesidades de las administraciones públicas, de las instituciones financieras y de los promotores de proyectos”, ha afirmado Kyriacos Kakouris, vicepresidente del BEI. “La política de cohesión es la cara más visible de la solidaridad de la UE y su papel sigue siendo clave para acelerar la doble transición verde y digital”.
Los compromisos del FEI en materia de garantías de crédito y capital riesgo para las regiones de cohesión se situaron en 2023 en 6.800 millones de euros, es decir, el 49 % del total de compromisos del FEI en la UE. Los cinco principales países beneficiarios fueron Rumanía, Bulgaria, Polonia, Francia e Italia.
“Garantizar la competitividad y la cohesión en toda la UE es fundamental para conseguir un futuro inclusivo, pero también una UE más fuerte en la escena mundial”, ha declarado la consejera delegada del FEI, Marjut Falkstedt. “Durante 2023, hemos proporcionado un apoyo importante a las pequeñas empresas situadas en muchas regiones en desarrollo de Europa, superando con creces nuestros objetivos, al tiempo que hemos contribuido considerablemente a impulsar los ecosistemas financieros locales”.
La nueva publicación también pone de relieve los principales elementos de las disparidades regionales, confirmando las tendencias definidas en el noveno informe sobre la cohesión elaborado por la Comisión Europea, e indica cómo la adopción de inversiones sociales específicas y una mayor conectividad pueden ayudar a superar esas diferencias. Para reducir los obstáculos a la cohesión será necesario acometer un volumen considerable de inversiones, en vista del déficit de financiación existente. Las inversiones destinadas a mejorar las competencias y la educación, la vivienda asequible, la conectividad y el acceso a los servicios contribuirán a cerrar la brecha entre las regiones de cohesión y el resto de la UE, mejorando el bienestar de la sociedad en su conjunto y reforzando el crecimiento sostenible.
En líneas generales, la UE clasifica las regiones en tres grupos en función de su nivel de desarrollo económico: menos desarrolladas, en transición y más desarrolladas. Los préstamos del BEI a las regiones menos desarrolladas ascendieron a 17.200 millones de euros, esto es, el 26 % del total de la UE, por encima del objetivo del 21 % fijado por el Banco.
Todos los países de la UE (excepto Luxemburgo) cuentan con regiones de cohesión —incluidas regiones en transición— y resulta fundamental adoptar inversiones específicas en estas zonas para desbloquear su potencial. Si bien es cierto que se han logrado avances considerables en la convergencia de la UE a nivel nacional, los resultados regionales dentro de los países siguen siendo desiguales. Según la Hoja de Ruta Estratégica del Grupo BEI para los años 2024-2027, aprobada por unanimidad por los accionistas del brazo financiero de la UE en junio, el apoyo a la política de cohesión es una de las ocho prioridades fundamentales del Grupo BEI.
Puede consultar el informe completo aquí EIB Group activities in EU cohesion regions 2023.
Información general
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) es la institución de financiación a largo plazo de la Unión Europea cuyos accionistas son sus Estados miembros. Ofrece financiación a largo plazo para inversiones sólidas con el fin de contribuir a los objetivos políticos de la UE. La financiación de proyectos que contribuyen a reforzar la cohesión económica, social y territorial de la Unión Europea ha sido una pieza clave de las operaciones del BEI desde su fundación en 1958.
Sus préstamos en materia de cohesión abarcan todo el espectro de la actividad económica y deben corresponder al menos a una de las cuatro prioridades del BEI: ciudades y regiones sostenibles; energía y recursos naturales sostenibles; innovación, capital humano y digital; y pequeñas y medianas empresas (pymes). Las regiones prioritarias del BEI en materia de cohesión abarcan las regiones menos desarrolladas (PIB per cápita inferior al 75 % de la media de la UE) y las regiones en transición (PIB per cápita de entre el 75 % y el 100 % de la media de la UE), tal como se define en el mapa de la política de cohesión de la UE.
El Fondo Europeo de Inversiones (FEI) forma parte del Grupo BEI. Apoya a las pymes europeas mejorando su acceso a la financiación a través de una amplia gama de intermediarios financieros seleccionados. El FEI diseña, promueve y aplica instrumentos de financiación de capital y de deuda destinados a las pymes. Mediante su actividad, el FEI promueve los objetivos de la UE de apoyo al emprendimiento, el crecimiento, la innovación, la investigación y el desarrollo, las transiciones verde y digital y el empleo.
En 2021, el BEI adoptó un documento de orientación en materia de cohesión para 2021-2027 que insta al Banco a aumentar sus préstamos en las regiones de cohesión hasta alcanzar el 45 % del total de sus préstamos en la Unión Europea para el año 2025. El documento también promueve que algo más de la mitad de ese importe (el 23 %) se destine a las regiones menos desarrolladas. El apoyo a la transición verde y a la innovación, al igual que las labores de asesoramiento del Banco, ocupan un lugar destacado a la hora de impulsar la inversión. La cohesión también se ha convertido en un indicador de desempeño clave para el FEI, que se fijó el objetivo de aumentar el volumen de actividad destinado a la cohesión del 38 % al 40 % para el año 2023.